Estimado Hermano:
Gozo y paz de nuestro Señor Jesucristo sean con vosotros ahora y siempre. Amen.
Gracias a Dios estamos bien.
Le escribo para manifestarle una vez más mi agradecimiento por vuestra presencia con nosotros la pasada semana en el Seminario.
Como le expresé aprecio mucho que haya tomado de su tiempo, se haya ausentado de su familia, de sus responsabilidades locales para venir a bendecirnos a nosotros.
Su tiempo en Cuba no ha sido en vano. El pequeño grupo de estudiantes donde ministró sepa que es extensión a muchas vidas.
Dios le siga usando, es nuestra oración. Esperamos ser bendecidos en otras nuevas ocasiones por medio de su enseñanza.
En lo personal, no tengo palabras para reconocer todo el aporte recibido, mis compañeros sienten lo mismo.
Recuerde avisarme si viene a enseñar en Santiago de Cuba.
Por favor, extienda un saludo a su familia y nuestro agradecimiento por concedernos su estancia entre nosotros.
DIOS LES BENDIGA!!!
Vuestro Hermano y Siervo
Adrián.
Vicepresidente de la Convención Bautista Occidental de Cuba.
Estudiante del programa de Maestría del STBH.
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